La aceleración de la economía arequipeña
Arequipa está experimentando un elevado crecimiento económico, bastante mayor al promedio del país. Según el Índice Compuesto de Actividad Económica (ICAE) del IPE, Arequipa se expandió 13% en el tercer trimestre del 2013, comparado con el mismo trimestre del año anterior. Este crecimiento señala una aceleración con respecto al ya elevado crecimiento de 12.4% acumulado en los primeros nueve meses del 2013. Estimamos que Arequipa ha sido una de las regiones con mayor crecimiento en el 2013, con un ritmo cercano al doble del estimado para el Perú.
El importante avance del ICAE en Arequipa en el tercer trimestre estuvo marcado por el crecimiento de los despachos de cemento, la producción agrícola y la dinámica del empleo. El boom inmobiliario, de hoteles y de centros comerciales, las inversiones en infraestructura por parte de los tres niveles de Gobierno, la producción agrícola destinado al mercado interno y externo, y la mayor demanda de empleos generados en todos los sectores productivos están presionando el acelerador de la economía arequipeña, superando al desacelerado crecimiento económico nacional. Los sectores que han contrarrestado parcialmente esta tendencia positiva del ICAE de Arequipa fueron la producción manufacturera, que viene cayendo, y la lenta recuperación de las exportaciones mineras.
Para comprender los resultados del ICAE Arequipa, conviene repasar la manera en que éste se construye. El ICAE constituye un indicador de corto plazo (expresado en frecuencia mensual y trimestral) que intenta informar del estado de una economía regional con un rezago de sólo algunas semanas. El ICAE es especialmente útil ante la retrasada publicación (de 10 meses aproximadamente) que hace el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) del Valor Agregado Bruto (VAB) de las regiones y que sólo se encuentra en frecuencia anual. Para la construcción del ICAE se seleccionan series que reflejen el comportamiento de distintos componentes de la demanda y de la oferta en la región.
Luego se aplican procedimientos estadísticos y matemáticos para sintetizar éstas series en un indicador que se aproxime tanto como sea posible al VAB anualizado del INEI. Si observamos el crecimiento promedio del ICAE de Arequipa durante los últimos doce años, se puede detectar que Arequipa ha presentado épocas de auge con tasas cercanas al 20%. Si se compara con el crecimiento promedio del PBI del Perú y del ICAE de Cajamarca, se pueden identificar semejanzas y diferencias muy interesantes (véase el gráfico). Por una parte, el comportamiento del crecimiento de Arequipa y el Perú ha sido semejante hasta el 2012, especialmente entre fines del 2008 e inicios del 2012. Sin embargo, desde mediados del 2012, el Perú viene mostrando cierta desaceleración del crecimiento mientras que Arequipa viene mostrando un crecimiento acelerado.
Por otra parte, es también interesante el contraste entre lo sucedido en Arequipa y en Cajamarca. Hay un divorcio casi total entre las tasas de crecimiento de ambas regiones, especialmente desde inicios del 2006. Así, desde mediados del 2012 Cajamarca muestra una marcada tendencia hacia el deterioro mientras que Arequipa muestra una fuerte aceleración en su crecimiento.
Estos resultados deben llamar la atención de los hacedores de política, de la sociedad civil y del sector privado en el sentido de que el crecimiento del Perú no implica un crecimiento simultáneo en todas las regiones. La actividad económica no depende sólo de factores nacionales sino que es fuertemente afectada por los eventos regionales. Esto resalta el impacto que tienen los gobiernos regionales y locales sobre el progreso económico de sus regiones. Para este 2014 prevemos que particularmente Arequipa preserve una tendencia positiva en su tasa de crecimiento y que el Perú muestre una recuperación en su tasa de crecimiento respecto al 2013, mientras que para Cajamarca no existen indicios de que la tendencia al deterioro se vaya a revertir. (Tomado de IPE 5-2-14)
El importante avance del ICAE en Arequipa en el tercer trimestre estuvo marcado por el crecimiento de los despachos de cemento, la producción agrícola y la dinámica del empleo. El boom inmobiliario, de hoteles y de centros comerciales, las inversiones en infraestructura por parte de los tres niveles de Gobierno, la producción agrícola destinado al mercado interno y externo, y la mayor demanda de empleos generados en todos los sectores productivos están presionando el acelerador de la economía arequipeña, superando al desacelerado crecimiento económico nacional. Los sectores que han contrarrestado parcialmente esta tendencia positiva del ICAE de Arequipa fueron la producción manufacturera, que viene cayendo, y la lenta recuperación de las exportaciones mineras.
Para comprender los resultados del ICAE Arequipa, conviene repasar la manera en que éste se construye. El ICAE constituye un indicador de corto plazo (expresado en frecuencia mensual y trimestral) que intenta informar del estado de una economía regional con un rezago de sólo algunas semanas. El ICAE es especialmente útil ante la retrasada publicación (de 10 meses aproximadamente) que hace el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) del Valor Agregado Bruto (VAB) de las regiones y que sólo se encuentra en frecuencia anual. Para la construcción del ICAE se seleccionan series que reflejen el comportamiento de distintos componentes de la demanda y de la oferta en la región.
Luego se aplican procedimientos estadísticos y matemáticos para sintetizar éstas series en un indicador que se aproxime tanto como sea posible al VAB anualizado del INEI. Si observamos el crecimiento promedio del ICAE de Arequipa durante los últimos doce años, se puede detectar que Arequipa ha presentado épocas de auge con tasas cercanas al 20%. Si se compara con el crecimiento promedio del PBI del Perú y del ICAE de Cajamarca, se pueden identificar semejanzas y diferencias muy interesantes (véase el gráfico). Por una parte, el comportamiento del crecimiento de Arequipa y el Perú ha sido semejante hasta el 2012, especialmente entre fines del 2008 e inicios del 2012. Sin embargo, desde mediados del 2012, el Perú viene mostrando cierta desaceleración del crecimiento mientras que Arequipa viene mostrando un crecimiento acelerado.
Por otra parte, es también interesante el contraste entre lo sucedido en Arequipa y en Cajamarca. Hay un divorcio casi total entre las tasas de crecimiento de ambas regiones, especialmente desde inicios del 2006. Así, desde mediados del 2012 Cajamarca muestra una marcada tendencia hacia el deterioro mientras que Arequipa muestra una fuerte aceleración en su crecimiento.
Estos resultados deben llamar la atención de los hacedores de política, de la sociedad civil y del sector privado en el sentido de que el crecimiento del Perú no implica un crecimiento simultáneo en todas las regiones. La actividad económica no depende sólo de factores nacionales sino que es fuertemente afectada por los eventos regionales. Esto resalta el impacto que tienen los gobiernos regionales y locales sobre el progreso económico de sus regiones. Para este 2014 prevemos que particularmente Arequipa preserve una tendencia positiva en su tasa de crecimiento y que el Perú muestre una recuperación en su tasa de crecimiento respecto al 2013, mientras que para Cajamarca no existen indicios de que la tendencia al deterioro se vaya a revertir. (Tomado de IPE 5-2-14)
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