Saludo del Presidente de la MCLCP por sétimo aniversario
El presidente de la MCLCP, Javier Abugattás Fatule, con ocasión del sétimo aniversario de su creación, dio un mensaje de saludo y aliento a los miles de representantes que la integran y cientos de voluntarios que apoyen su trabajo y que comparten el objetivo de trabajar por la reducción de la pobreza y la búsqueda de una vida digna para todos los peruanos.El presidente de la MCLCP, recordó que la institución afronta un contexto diferente al del 2001 en el que existían condiciones políticas, sociales y económicas que hacían urgente construir y mejorar las relaciones entre la sociedad y el Estado. Estas relaciones han ido mejorando porque el país ha entrado en un proceso de descentralización que obliga a mirar más el nivel nacional, regional y el local, puntualizó.Comentó que la creación de la MCLCP por un decreto supremo y después su ratificación a través de la Ley orgánica de gobiernos regionales, evidencia la necesidad de distintos mecanismos que permitan a todos los ciudadanos una mayor participación, a través de un pacto ético que ponga, tal como lo señala la Constitución, a la persona como el centro y la razón de ser del Estado.Es necesario reconocer y saludar a las personas que participan en la MCLCP que dedican tiempo y esfuerzo, a los miembros de los Comités ejecutivos y en especial a los coordinadores que están trabajando de manera ad honorem en todo el país para lograr una mejor calidad de vida de todos los peruanos, puntualizó.La MCLP fue creada el 18 de enero del 2001 durante el gobierno transitorio y hoy enfrenta los retos que presenta el nuevo escenario político bajo la premisa que la gestión pública no es asunto exclusivo y excluyente de quienes acceden a responsabilidades de gobierno sino que involucra también a la sociedad civil. La presencia regional y su articulación nacional han sido centrales para que la MCLCP en sus siete años de vida contribuya al proceso de descentralización, apoye la institucionalización de experiencias como la formulación de planes de desarrollo concertados y presupuestos participativos así como el seguimiento y la vigilancia de los programas sociales y la prioridad de atención a la infancia. Más recientemente la Mesa está impulsando la incorporación de la promoción del trabajo digno en su agenda así como los esfuerzos por una gestión orientada a resultados a partir de los programas estratégicos presupuestales.Este 2008, la Mesa tiene como objetivo contribuir a la concertación y movilización nacional para el logro de la meta de reducción de la pobreza al 30% al 2011, a partir de las prioridades que tiene planteadas para su trabajo de concertación: desarrollo de capacidades humanas y protección de la infancia; desarrollo económico con trabajo digno; gestión ambiental sostenible; y desarrollo institucional con descentralización y participación.Al respecto, Abugattás añadió que en una economía en crecimiento como la peruana, nada impide que se pueda mejorar la calidad de vida de la población –en dos o tres años— y que el reto de la Mesa es trabajar reconociendo las razones por las cuales, a pesar del crecimiento, no se han logrado mejoras sustanciales en la calidad de vida de los más pobres.Reducir la pobreza a un 30 por ciento al 2011, es difícil, pero sí es posible, y para ello se debe empezar por la definición de prioridades claras e insistir en ellas por periodos prolongados hasta que se logre resultados concretos, siempre en un trabajo mancomunado entre el Estado y la sociedad. El resultado a lograr debe empezar con el empleo digno, que es la verdadera solución de la pobreza, y por garantizar el pleno desarrollo de capacidades en la primera infancia. A esto se debe añadir las tareas de prevención de desastres, como lo que sufrió Ica el año pasado a raíz del terremoto, y agregar la atención al fenómeno del cambio climático que va a ser el desafío del Perú en los siguientes años, precisó Abugattás.
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